No me cuentes cuentos chinos, ni nos quieran ver la cara, Los
chinos son presa de un sistema opresor y las chinas, hasta hace poco tenían prohibido
nacer.
China es esclava, su pueblo es sumiso, se dejó doblegar. La democracia en aquel país no
existe. Desde que el poder comunista se
sentó en aquel país, las leyes se crearon para asegurar cada “avance” del
estado dictador.
El pueblo chino es víctima y Nicaragua lo será en poco
tiempo. Sabíamos que lo que vivimos ahora, pasaría. Si se viola en casa y se
llega a gobernar, también se violara la nación y todo lo que haya sobre sus
límites y más allá, si se le permite.
El pueblo chino no puede levantar su vos todavía, en Nicaragua hay
fuerza y valentía. Luchar contra el canal es luchar por la vida y dignidad de
los pueblos, la seguridad del medioambiente y de la soberanía.
Nicaragua es el segundo país más pobre de América Latina y
el canal no lo hará más rico. Los nicas habremos perdido la tierra, el arraigo,
el aire, la esperanza y la vida. Nicaragua será de China y no del pueblo chino, será de los
delincuentes que se crecen estafando a su propia gente, será de los que llegan
al poder para enriquecerse no para mejorar un país.
Nos venden el canal como desarrollo pero es el cuento chino que me resisto a creer.
¿Tú le crees a Daniel y a la Chayo?
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